Baltasar Fra Molinero
Las mujeres africanas proclaman su libertad ante la Inquisición en Canarias
La Inquisición española de ambos lados del océano Atlántico tuvo una particular actividad en la persecución de mujeres negras tanto africanas como afrodescendientes. Género y raza, condición esclava o libre recibieron un particular tratamiento negativo en lo legal, teológico y social a manos de los diferentes tribunales del Santo Oficio a lo largo de su existencia. En los casos contra mujeres negras y mulatas, los casos de prácticas de hechicería son mayoría. Pero en las Islas Canarias hay también casos de mujeres nacidas en África que sufren acusaciones relacionadas con su religión de origen, casi siempre el islam. Todas ellas transgreden su condición legal de esclavas mediante prácticas que son interpretadas como un atentado a la hegemonía religiosa del catolicismo y un acto de rebeldía. Sus actos y sobre todo sus palabras, denunciadas por testigos en su mayoría femeninos y que incluyen con frecuencia a sus dueñas legales, demuestran una actitud por parte de las mujeres negras africanas resolutamente crítica con las ideas religiosas imperantes y con su situación de esclavitud, que no aceptan como legítima. Ceremonias heterodoxas antes y después de comer, críticas al culto a las imágenes cristianas y el recuerdo de la tierra de origen como lugar de libertad son respuestas dadas a una autoridad inquisitorial que intentaba reducir a los diferentes sectores de la sociedad canaria a aceptar el orden establecido a través de los fenómenos de manifestaciones religiosas.